Se tomaron 400 pacientes embarazadas en trabajo de parto con edades comprendidas entre 15y 40 años. De ellas 200 asistían a un establecimiento privado y 200 a un hospital público. Las pacientes que asistían al hospital público eran más jóvenes que las que asistían al establecimiento privado. Se observó que las diferencias económicas, sociales y culturales tienen repercusión en las formas de comportarse dichas pacientes durante el embarazo y momento del parto. Las pacientes estudiadas en el hospital público tenían un nivel académico y cultural muy inferior con respecto a las del establecimiento privado.