Nivel de conocimiento de los residentes de las áreas de neurocirugía y emergenciología sobre el protocolo para el tratamiento del traumatismo craneoencefálico severo del Hospital Docente Universitario Doctor Darío Contreras y su relación con la evolución de los pacientes abril - agosto 2022

Abstract

El traumatismo craneoencefálico se ha considerado como una pandemia a través de los años debido a la cantidad de personas que fallecen anualmente por esta, La cifra se estima entre 579 casos por 100 mil habitantes al año a nivel mundial. Siendo la República Dominicana el país con mayor incidencia de esta enfermedad, es de suma importancia que los doctores en formación de las áreas de emergenciología y neurocirugía, estén al tanto de las actualizaciones en la terapéutica y métodos diagnósticos sobre esta. Se realiza un estudio descriptivo, observacional y prospectivo de corte transversal, con el objetivo de determinar el nivel de conocimiento de los residentes sobre el protocolo sugerido para el manejo del TCE severo y su relación con la evolución de los pacientes que asisten al Hospital Docente Universitario Dr. Darío Contreras durante el periodo abril - agosto del año 2022. Se toma una muestra de 64 pacientes con TCE severo sobre los cuales se investigó si el protocolo sugerido para el manejo de estos pacientes fue aplicado, además de someter a un examen a los residentes de todos los años de las áreas de emergenciología y neurocirugía sobre el protocolo en cuestión, donde se logró evidenciar que un 20.59 por ciento obtuvo una calificación superior aprobatoria, un 32.35 una calificación insuficiente y un 47.06 una calificación reprobatoria, resultando con menor calificación los residentes con menor tiempo en la especialidad. De los pacientes afectados, se encontró un predominio masculino abarcando un 100 por ciento de la muestra utilizada y una edad promedio entre los 13 a los 40 años, siendo la media los 28 años. Las medidas establecidas dentro del protocolo sugerido se llevaron a cabo dentro del 42.18 por ciento de los pacientes evaluados en el hospital, el otro 57.82 donde no se llevó a cabo la totalidad de las medidas correspondían a pacientes que ya se encontraban estabilizados sin la necesidad de completar el esquema terapéutico o pacientes que poseían complicaciones de mayor riesgo las cuales se interponían al manejo otorgado por el personal de salud. Una tasa de mortalidad elevada fue evidenciada donde el 26.6 por ciento de los pacientes sobrevivió y el 73.4 por ciento restante falleció durante la aplicación del protocolo en cuestión.