Resumen
Se reproducen las palabras de Joaquín Salazar García quien agradece en nombre de sus hermanos, demás familiares la distinción otorgada a su difunto padre concederle su nombre a ese imponente edificio del campus de la UNPHU. Se recuerda que para él su trabajo universitario significó un reencuentro con esa juventud de anhelos intelectuales y patrióticos. En la UNPHU la armonía y la tensión vital del educador que siempre fu e volvió a lanzar sus acordes a una integración vibrante con la juventud. Se siente que Joaquín E. Salazar hijo forma ya parte de este edificio y de lo que representa. Su obra como educador es parte de la vida de los jóvenes que influenció y que son sus hijos intelectuales.